En los dos meses y poco que llevamos de curso hemos podido detectar una necesidad más o menos común en la mayoría de los niños y niñas. Se trata nada más y nada menos que de la atención.
Es frecuente que en clase tengamos que repetir en varias ocasiones la misma explicación o la misma regla de un juego, simplemente porque uno o varios de los alumnos no estaban prestando atención en el momento adecuado. Tampoco nos sorprende que se salten la mitad de un ejercicio o que lo hagan de manera errónea porque no se han parado el tiempo suficiente a leer el enunciado.
Ante esta dificultad, por llamarla de alguna manera, que presentan muchos de nuestros niños, proponemos algunas actividades que se pueden realizar en casa y que podrían ayudarles a mejorar paulatinamente la atención. Evidentemente, las actividades tienen que atraer la curiosidad de los niños, ya que si no lo hace difícilmente se concentrarán en realizarlas.
Veamos algunos ejemplos:
- Realizar dibujos de simetría. Se trata de completar dibujos a través de una mitad dada. Todas las actividades que requieran la copia de un dibujo según una serie de patrones pueden ser muy adecuadas para aquellos niños y niñas a los que les gusta pintar o dibujar. La dificultad irá variando en función del progreso del niño.
- Colorear dibujos siguiendo un patrón. Esta actividad es muy similar a la anterior: únicamente se trata de colorear un dibujo igual que otro que tenemos ya coloreado.
- Laberintos. Los laberintos son pasatiempos que pueden ayudar a que nuestros niños y niñas sean capaces de mantener la atención durante un periodo de tiempo medianamente prolongado (este periodo dependerá de la dificultad del laberinto).
- Sopas de letras. Es aconsejable que, al principio, no sean muy complejas, puesto que el hecho de no encontrar las palabras en un determinado periodo de tiempo puede hacer que los niños se frustren y pierdan la atención.
- Encontrar las diferencias. A igual que con las sopas de letras es aconsejable empezar por las más sencillas e ir aumentando la dificultad progresivamente.
- Realizar copiados sin fallos. Esta actividad es mucho menos llamativa para los alumnos y alumnas, pero también resulta eficaz a la hora de mejorar la atención, al mismo tiempo que se mejora la caligrafía.
- Juegos para realizar en el ordenador o la tablet. Sabemos que nos encontramos en una sociedad dominada por la tecnología donde lo raro es que los niños y niñas no tengan acceso a algún soporte electrónico. Por este motivo también proponemos algunos juegos que se pueden encontrar en internet y que ayudan a practicar la atención.
Finalmente, os dejamos un enlace en el que podéis encontrar muchos de los recursos que hemos comentado: Recursos y fichas para trabajar la atención.
Esperamos que os sirva esta entrada.
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