Desde 3ºA no hemos querido quedarnos atrás y también hemos estado trabajando la poesía. En este caso, nos hemos dedicado a leer poemas cortos entre toda la clase.
Para mostraros lo que hemos hecho, algunos niños y niñas se han grabado leyendo los poemas y otros, voluntariamente, han plasmado el poema de forma escrita acompañado de un dibujo relacionado con el mismo.
En este sentido me gustaría señalar que la escuela
desempeña una labor decisiva en la transmisión del patrimonio literario.
Además, se podría añadir que en este tiempo en el que vivimos tiene una mayor
responsabilidad, ya que los niños y niñas, por lo general, se encuentran más inmersos
en la cultura de la comunicación audiovisual que en la escrita. Es por este
motivo que la mayor parte de ellos se encuentra con la literatura casi
exclusivamente en su centro educativo.
Inculcar a los niños y niñas el gusto por
la poesía es abrirles las puertas a una parte fundamental de nuestra riqueza
cultural. Además, la poesía nos permite expresarnos y conocer nuevas formas de
ver nuestra realidad, porque, como dijo Robert Penn (Novelista y poeta
estadounidense): En el fondo, un poema no es
algo que se ve, sino la luz que nos permite ver. Y lo que vemos es la vida.
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